Liposucción

¿Cómo se realiza?

Durante la operación, el cirujano recorre primero con una cánula cada sector de la zona que se va a lipoaspirar (que ha sido previamente marcada) e inyectará una solución líquida. Esta solución está formada de anestesia, una droga que contrae los vasos sanguíneos y una solución salina que ayudará a desprender la grasa de la piel y del músculo, disolviéndola y convirtiéndola en un líquido viscoso. Más tarde, se procederá a retirar este líquido mediante un procedimiento de succión, a través de una cánula que previamente se ha introducido y que está conectada a una máquina de aspiración.

Duración

Una liposucción dura habitualmente entre 1 y 3 horas, aunque el tiempo definitivo dependerá del tipo de liposucción y la técnica que se va a utilizar. Como en cualquier otra cirugía, se utiliza anestesia local o general.

Recuperación

La liposucción es una operación poco invasiva y tampoco es muy complicada. En la mayoría de los casos basta una semana para que el paciente se mueva con normalidad, aunque requerirá de ciertos cuidados por más tiempo.

Después de la liposucción te recomendamos someterte a drenajes linfáticos. Estos te ayudan a controlar la inflación, mejorar la circulación y acelerar el proceso de cicatrización y recuperación de los tejidos.

Además te ayudan a mejorar el estado y la hidratación de la piel de la zona lo que disminuye la probabilidad de presentar flacidez.

Usa la faja de compresión

El uso correcto de la faja de comprensión también es un factor determinante en la disminución de la flacidez de la piel. Esta ayuda a que exista una buena circulación de sangre en la piel de la zona tratada.

Además al generar una presión constante y uniforme sobre la piel lo que evita que se produzcan arrugas, pliegues y que esta se adapte mejor al nuevo contorno.